🌙 Cuento para dormir 🛌
Érase una vez una niña que todas las noches, antes de acostarse, se volvía pequeña, pequeña.
Mamá -decía-, soy una hormiga.
Y su mamá comprendía que era la hora de acostarla
La niña se despertaba a la salida del sol, pero todavía continuaba siendo pequeñísima; cabía toda ella en la almohada y todavía sobraba un trozo.
-Levántate -le decía su mamá.
-No puedo -respondía la niña-, no puedo, todavía soy demasiado pequeña. Ahora soy como una mariposa. Espera a que crezca un poco más.
Y al cabo de un rato exclamaba:
-Bueno, ya he crecido.
Y dando un chillido, saltaba de la cama y empezaba el nuevo día.