Fábulas con animales 🦉 Refran
Una lechuza se enteró de que en cierto palomar vivían muy bien alimentadas unas palomas. Así que sin dudarlo se pintó de blanco para disfrazarse y se mezcló con ellas.
Las palomas no reconocieron a la intrusa, mientras estuvo sin abrir el pico; pero un día que olvidó cuál era su papel, chilló como la lechuza que era y las palomas la echaron a picotazos del palomar.
Desconcertada, regresó a la torre de la iglesia donde vivía, pero sus compañeras lechuzas no la reconocieron con su nuevo blanco plumaje y también la echaron de su lado. Así la pobre lechuza perdió su propio refugio.
Quien su bien usurpa al dueño,
no espere tranquilo sueño.
Refrán
Moraleja de la fábula la lechuza y las palomas
Esta historia tiene un mensaje muy importante para los niños y adultos por igual.
Es importante respetar los límites de los demás y no tomar lo que no nos pertenece.