El carpintero que llevó una puerta a la farmacia 🚪🪚
Un día la esposa del carpintero cayó enferma y el médico fue a hacerle una visita. Después de examinarla, quería escribir la receta, pero en casa del carpintero no había ni papel ni pluma.
Todo lo que pudo encontrar el carpintero fue un pedazo de tiza, y como no podía aprenderse de memoria la receta, el médico decidió escribirla con la tiza en la puerta. Cuando el farmacéutico vio llegar al carpintero arrastrando una puerta, quedó estupefacto.
«Esto debe ser un error», dijo el farmacéutico, «no he encargado una puerta nueva». «No te he hecho una puerta nueva», dijo el carpintero, «es solo que el médico me ha escrito aquí una receta». El farmacéutico estalló en sonoras carcajadas. Ni que decir tiene que al carpintero el incidente le resultó bastante enojoso, porque poco tardó en ser conocido por todos los habitantes del pueblo, que se rieron de lo lindo de él.
Y, sin embargo, la historia tuvo un final feliz para el carpintero: la medicina que le había prescrito el médico curó a su mujer en un santiamén.
Conclusión final de la fabula: LA EXTRAÑA RECETA🚪🪚
A veces, la falta de recursos nos obliga a buscar soluciones ingeniosas, pero también puede provocar situaciones cómicas o absurdas. Lo importante es no perder el sentido del humor y el amor por los demás.
5 lecciones sobre la fabula🚪
La salud es lo más importante y hay que cuidarla. 🏥
El amor puede mover montañas, o en este caso, puertas. 💘
La comunicación es esencial para evitar malentendidos. 🗣️
El ingenio puede ser una gran virtud, pero también puede tener sus inconvenientes. 🧠
Hay que saber reírse de uno mismo y no tomarse las cosas demasiado en serio. 😂