Fábulas de Esopo – Moralejas 🐺
Había un ciego que tenía la habilidad de reconocer por el tacto a todos los animales que se le acercaban y era tal su destreza que además podía decir a qué especie pertenecía.
Un día, sus amigos quisieron probar su destreza y le presentaron un lobezno. Acto seguido el ciego palpó al animal y, permaneciendo un instante vacilante, dijo al fin:
-No estoy seguro, pero creo que se trata de un lobezno de zorra o de otro animal parecido; con todo, puedo aseguraros que no ha nacido el muy villano para convivir en un rebaño de corderos.
Al malvado se le reconoce a la legua.
Refrán